simplemeteyo wrote:Aida, ¿Crees que alguna vez usarías el cachete?
Como es lógico, siendo consecuente con mis ideas a día de hoy sólo puedo decir que espero no utilizarlo nunca. Obviamente, no puedo asegurar lo que haré en un futuro, pero me sorprendería mucho si llegase a utilizarlo.
simplemeteyo wrote:P.– Se ha producido un cambio de educación, de una formación restrictiva a que ahora aquellos niños den a sus hijos mucha más libertad. ¿Esa transformación ha generado esta problemática?
R.– En España se ha hablado mucho porque hemos vivido una dictadura, pero es verdad que se ha dado un cambio y nosotros lo conocemos muy bien, pero la explosión de los trastornos de conducta no es propio de nuestro estado, vamos a Francia y ocurre lo mismo y tienen una república desde hace muchos años, en EE.UU. y en Inglaterra... Se debe más al cambio social que hemos vivido en Occidente, de repente todo es rápido y no tenemos tiempo para asimilar los cambios, es más, para cuando empezamos a asimilarlos ya ha llegado un nuevo cambio.
Estoy muy pero que muy de acuerdo con la respuesta que ha dado pero bajo mi punto de vista trata de restar demasiada importancia al hecho de la libertad que se les concede a los alumnos hoy en día. Al menos esa es la impresión que me da a mí...veamos, hemos pasado de una dictadura en la que la violencia es la madre de la educación (mano dura, y aprenderás pronto y rápido) al otro extremo (como toques a mi hijo te denuncio). Demasiados cambios...y lo que es peor, demasiado rápidos. Las prisas nunca son buenas. Para nada estoy de acuerdo con que se use la violencia en las aulas, pero creo que es excesiva la permisión que se les está dando a los alumnos...así vamos.
He de decir que, aunque a grandes rasgos estoy de acuerdo con
Inma, no pienso que la permisión que se da a los alumnos sea excesiva, o no al menos la que se refleja en los documentos del centro, que recogen sus deberes y derechos junto con las normas de conducta que deben llevarse a cabo en el colegio. Otra cosa es la importancia que cada profesor dé dentro de su aula a la disciplina, además de la capacidad que tenga para saber llevar la clase sin que los alumnos se le suban a la chepa. Pero eso es algo individual donde entran en juego las prioridades de cada docente, a nivel de centro sí hay unas normas que deben hacerse cumplir y que, bajo mi punto de vista, suelen ser bastante adecuadas (aunque no son las mismas en todos los colegios, pero sí acostumbran a seguir una misma línea en los colegios públicos)
simplemeteyo wrote:P.– ¿Son necesarias otro tipo de asignaturas en el colegio que formen a los niños en valores?
R.– La formación en áreas de conocimiento, es propia de la educación, y la del individuo, de la familia. Antes el maestro tenía la potestad de intervenir también en el proceso de educación de la persona, era una figura con una respetabilidad social y para la gran mayoría de la gente, los maestros han sido modelos. Hoy en día el maestro es un funcionario que hace su trabajo y si lo hace bien o mal, afectará a los resultados académicos de mi hijo. No hay una relación como había antes con esa figura del maestro
Hoy en día, como bien ha dicho la entrevistada, los maestros no son educadores. Llegan a clase, dan la lección y se marchan. Así no se puede llegar a ningún sitio. Y lo peor es que los maestros que tratan de hacer las cosas bien resulta que son criticados, incluso despedidos. De esto ya hablé en un post (el que colgaste tu Aida). Cuando un maestro trata de hacer las cosas bien normalmente necesita pasar más tiempo con los niños del que se les concede en las clases, para conocerlos, tratarlos...pues ya de entrada los padres ya tienen un horario para el niño, tienen su vida programada...y lo mejor de todo es que si la cosas salen mal y el niño es un mal educado las culpas son para el maestro o la escuela. En fin. A lo que quería llegar es que ya que no hay maestros que se quieran "mojar" en la educación de los niños... deberían de haber más asignaturas que impliquen la formación del civismo, por ejemplo. A mi parecer la asignatura de Ética, por ejemplo, es una asignatura super chula pero que los niños no le hacen ni puto caso, porque de entrada no se le da la importancia que merece, y a veces ni se la toman en serio los profesores...
Me gustaría comentar algunas cosas con respecto a este punto.
En primer lugar, creo que generalizas diciendo que “los maestros no son educadores”, que “llegan a clase, dan la lección y se marchan”, que “los que tratan de hacer las cosas bien resulta que son criticados, incluso despedidos” y, muy especialmente, que “no hay maestros que se quieran mojar en la educación de los niños”. Claro está que en las escuelas hay de todo, pero creo que todos nos hemos encontrado a lo largo de nuestra vida con profesores motivados que se han implicado en nuestra enseñanza e incluso en nuestra educación, de los que hemos aprendido algo más que matemáticas o lengua y a los que seguramente no olvidaremos nunca. Seguramente son los menos, de acuerdo, pero existen maestros que no lo son sólo para cobrar un sueldo a final de mes y creo que también deben ser tenidos en cuenta.
Por otra parte, sí soy partidaria de que haya alguna asignatura explícita en la que se enseñen valores, pero lo cierto es que es un tema complicado, teniendo en cuenta que intentar infundir algo tan subjetivo en personas fácilmente manipulables como son los niños a ciertas edades puede ser incluso peligroso. A mí me parecería genial que se les quisiesen transmitir mis valores, que seguramente son totalmente opuestos a los de muchas otras personas que también querrían que se enseñasen los suyos. Así pues, creando este tipo de áreas nos estamos posicionando y, aunque sé que a veces hay que tomar partido, terminaríamos moviéndonos, como ocurre con las leyes de educación, al son que nos marquen los políticos de turno.
Para compensar esta carencia, existen las
áreas transversales que, bajo mi punto de vista, creo que sería más que suficientes para formar en valores a los alumnos si se llevasen a cabo como es debido. Éstos son temas que, se supone, deben tratarse desde todas las otras asignaturas, de manera vertical. Algunos ejemplos son la "Educación ambiental", la "Educación para la paz", la "Educación de la salud" (sexo, alimentación y drogas, básicamente)... Aunque, por desgracia, al final esto no se lleva a cabo de manera periódica y acaba traduciéndose en tres o cuatro actividades (charlas, excursiones...) puntuales que los chavales toman como algo lúdico sin mayor importancia.
También están, por otra parte, los
contenidos actitudinales ("demostrar interés hacia la asignatura", "ser respetuoso con los compañeros", "mostrar una actitud empática para con los demás"...), que quedan muy bonitos para decorar el currículum pero que no se tienen en cuenta a la hora de evaluar a los alumnos, motivo por el cual la mayoría se los pasan por el forro (y eso suponiendo que sepan que existen)