- La fumada y el polvo de la otra noche, cuando llegué de Madrid. Estar con él en nuestra (cómo mola) habitación ^^
- La panzada de llorar en el coche, echarlo todo, todo. Lo necesitaba.
- Estar anoche hasta las tantas aquí, sin hacer nada, más que canalizar emociones y todas esas cosas, que también eran necesarias.
- La tarde de hoy con Llucia en su casa nueva. No es su casita de montaña, tan especial para mí por las historias allí vividas, pero es una pasada! La terraza, la situación, la luz... Me ha encantado!
- Volver a abrazarla, después de tanto tiempo (vale, sólo han sido diez días, pero la he echado un montón de menos
) - Las horas sentadas en el sofá, contándole tooooodo lo del Extre. Pobreta, no sé cómo ha aguantado y encima dice que se lo ha pasado genial ^^
- Saber que la tengo a mi lado.
- Llegar a casa y que viniese Juan. El rato con él en la cama, sus besos en el sofá...
- "Aïda? Aquí está, comiéndole la boca a su novio, que cree que no la veo" xD
- "Cuando mis padres sean mayores y estén como mi abuelo... yo no tendré ningún primo ni hermano en quien apoyarme" "Bueno, pero estaré yo".
Si sigue adelante, hay cierto proyecto de la Fundación Antonio Machado que acaba de conseguir que tenga ganas de quedarme en mi instituto.
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