Hace unos seis años, viví una etapa intensísima en mi vida. Conocí personas que cambiaron parte del rumbo que equivocadamente (ahora lo creo así) estaba tomando. No digo que para mal o para bien, sino que no era el rumbo adecuado.
De estas personas aprendí una serie de formas de vivir los momentos, las intenciones, los minutos y segundos...
Volví a sentirme libre, único, lleno de vida... pude explayarme en cada uno de mis átomos, de mis células. Aprendí a compartir algo más que lo material... algo más que un simple rato de charla o unos canutos.
Hice locuras y me demostré a mi mismo todo lo que es capaz de hacer cualquier persona con un poco de sensibilidad. Aprendí a crear, a sacar de mi cada fragmento del arte que tod@s llevamos dentro. Me difuminé en mil colores, me perdí entre mis adentros para encontrarme fuera con tod@s l@s demás... me dejé llevar por todo el placer del que cada un@ somos infinitos portadores.
...Me atreví a romper las distancias, las normas, la moral más inmoral...
y efectivamente comprobé : QUE TODO LO QUE IMAGINABA ERA CIERTO. NO SOLO YO SENTÍA Y PENSABA ASÍ.
Atravesé el país, escribí hasta la saciedad, me abrí hasta las más mínimas sensaciones....
Pero la rutina, poco a poco nos va comiendo y yo no iba a ser menos.
En resumen, no volvería atrás, pero si que poco a poco voy recuperando todo aquello que aprendí en esos momentos, porque sigo pensando que la historia avanza hacia adelante y yo con ella... pero la historia me debe permitir ser LIBRE Y ÚNICO, aunque toda vaya de cabeza.
Mis sentimientos y mi pensamiento son míos. Los comparto si la otra persona quiere. La vida siempre nos pone delante a las personas adecuadas... solo hay que saber mirar , pero están ahí.
GRACIAS J., GRACIAS L., GRACIAS LU., GRACIAS P., GRACIAS I.
Y AHORA, GRACIAS L. Y FITIS.